Buenas noches, si es que se pueden llamar buenas, hoy después de mucho tiempo y recordando viejos tiempos, decidí volver a escribir de nuevo, sé que han pasado muchos años desde mi última entrada pero es la única manera que encuentro para desahogarme y expresar todo aquello que siento, puesto que hoy fui cruel con una persona que conozco de hace bien poco, pero en la que puedo decir que a día de hoy no sabría vivir sin ella, <S.> es .... de las mejores cosas que me ha dado la vida, no sé cómo no hay más gente como ella en este planeta, <S.> es una persona que hace levantarte el ánimo, sacarte una sonrisa y olvidar tus preocupaciones de manera inmediata, es como el medicamento a los mejores remedios de las problemas que uno tiene, pero tiene sus efectos secundarios como todo medicamento, es que cada vez quieres más y más, llegando ser cruel con ella sin llegar a merecerlo y todo por culpa mía por seguir abusando de su cura.
Esa crueldad vino hoy por un mal comentario que hice por no pensar en las palabras que digo, esas palabras que cuando salen de mi boca llevan ese veneno, que guardo en lo más profundo de mi cuerpo. Por ese motivo escribo esto, para que esos 2 minutos que te perdí en los que afuera de tu casa estaba con lágrimas en los ojos, al igual que ahora que escribo esto, solamente era para darte la cura a esas palabras envenenadas que te lance, la de 2 simples cosas un ABRAZO y un LO SIENTO. Puesto que desde que sucedió no conseguí pensar en otra cosa que no fueras tú, en el daño tan gratuito que te hice.
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